El "poder evocador" del pasado industrial argentino






















Seguramente si Ud. conoce la ciudad de Buenos Aires y alguna vez viajó en las líneas de subterráneos D y E habrá tenido la posibillidad de observar y apreciar extraordinarios murales de azulejos que evocan escenas históricas del pasado argentino.
Presentamos aquí una pequeña galería de ellos, que fueron elaborados en la década del 30 en la fábrica Cattáneo.
Su variedad y colorido tienen relevancia ya que se han reconocido mundialmente por su calidad y originalidad.
La fábrica Cattáneo estaba ubicada en la calle Thames de Villa Adelina. Los vecinos de la zona la recuerdan por la presencia de los obreros y obreras que imprimían al barrio una dinámica particular.

Los objetos que rememoran...














Mientras recopilabamos información en la web y los
archivos revisados para recabar datos sobre los obreros desaparecidos de las fábricas de cerámicas de Villa Adelina, se fueron abriendo otras formas de reconstrucción del pasado.

Los objetos elaborados en estas fábricas también fueron saliendo de las alacenas de los amigos y se integraron en una pequeña colección. Otros fueron ofrecidos en venta por sitios de internet. Aquí presentamos una galería integrada por las primeras miniaturas compradas en Flores y por la última adquisición que data del año 1950.

Cada pieza es símbolo de la acción de trabajadores y trabajadoras que diariamente durante más de cincuenta años se esforzaban en largas jornadas de labor.

Lozadur ayer-hoy






La fábrica de Porcelanas Lozadur se instaló en la ciudad de Villa Adelina en la década de 1930.
La importancia del desarrollo industrial que la Argentina tuvo durante los años 40 y 50 bajo el modelo de sustitución de importaciones permitió su crecimiento. Muchos testimonios indican que el movimiento de los obreros de la fábrica era fundamental en la estación Villa Adelina del Ferrocarril General Belgrano muy temprano en la mañana. También el recuerdo de la sirena fabril es rememorado por antiguos vecinos de la localidad.
La expansión fue notoria, su vista aérea nos permite dimensionar la magnitud de los procesos productivos que se apoyaban en miles de brazos de trabajadores, hombres y mujeres, provenientes de localidades ubicadas a la vera de ese ferrocarril.
La fábrica alcanzó un fuerte liderazgo en el mercado con sus modelos Festival, Kent y Marly, todos en nuestras alacenas alguna vez tuvimos alguna vajilla de estos diseños.
Pero la destrucción de la industria nacional que llevó a cabo la gestión del ministro José A. Martinez de Hoz, bajo la dictadura militar, significó la apertura de la importación indiscriminada de productos provenientes de China. En ese contexto la dictadura estableció con férrea decisión la más dura política de represión y disciplinamiento social y la fábrica hoy, sus muros y sus restos son el más cruel testimonio de esta política salvaje.
Por eso en la actualidad estamos dedicados a recuperar testimonios que den cuenta de las historias de vida que transcurrieron en los largos turnos de trabajo en los tiempos difíciles para la defensa de los derechos de los trabajadores y trabajadoras.

Otros pasos para encontrar más datos...


Cuando comenzamos a investigar teníamos un dato cierto y muchos caminos por recorrer.

Quien había sido vecina de las chicas Abadía Crespo recordaba esa mañana de noviembre cuando en el vecindario de Del Viso la noticia del secuestro de las jóvenes era la noticia del día.

Con estos recuerdos y mucha paciencia fueron apareciendo tanto en la Web como en los archivos de los organismos de Derechos Humanos y los documentos que nos fueron brindando otros datos muy esclarecedores . La misma noche que Dominga y Felicidad fueron arrancadas de sus casas, también otros obreros de la fábrica Lozadur vivían la misma injusta situación.
Todos residían en localidades cercanas a la zona de Campo de Mayo, seguramente todos tomarían el Ferrocarril General Belgrano para llegar a sus turnos laborales cuando la sirena de la fábrica señalaba la hora de ingreso en la localidad de Villa Adelina.
Desde hace unos años los Estados Unidos dieron a conocer la documentación oficial que registraba los informes y actuaciones de lo sucedido en la Argentina durante la última dictadura, así los archivos de la represión se conocen a través de la web, en el sitio http://www.desclasificados.com.ar/ .
Esa fue nuestra segunda instancia fundamentada de información general sobre estos hechos que tristemente tuvieron como protagonistas a siete obreros de Porcelanas Lozadur.

Dos trabajadoras y el comienzo de la investigación




Los ejercicios de memoria son complejos y por lo tanto imbrican muchas tramas de Historia, en este caso comenzó por la reconstrucción de la vida de Dominga y Felicidad Abadía Crespo, dos jóvenes trabajadoras en la Fábrica Lozadur, que vivían con sus padres en la localidad de Del Viso y fueron desaparecidas por fuerzas militares la noche del 2 de Noviembre de 1977, según consta en el informe Nunca Más, que publicó la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas, instituida en 1983 en el retorno al sistema democrático constitucional

La fábrica de porcelana














Este título coincide con el título de la obra reciente del filósofo italiano Toni Negri, pero para nosotros es la referencia a la fábrica de Porcelanas Lozadur, establecida en la ciudad de Villa Adelina a fines de la década de 1930. La industria se expandió notablemente especialmente en la década del sesenta lo que le permitió alcanzar el liderazgo en el mercado nacional y dar empleo a mas de 2000 empleados que son cumplían arduas jornadas de labor entre las arcillas y los hornos, para lograr vajillas de diversas marcas, entre otras Boulogne, Festival, Marly, con diseños propios y bien difundidos como el de la línea Kent o el rosado paisaje oriental